viernes, 18 de febrero de 2011

Proposición deshonesta

Esta tarde he aprovechado las dos últimas horitas de luz para dar un voltio con la Cannon. Riofrío, Navillas, Soto de Revenga... Y me he acercado al Vado de los Tres Maderos para ver si había nieve.


La cosa no tiene demasiada buena pinta, porque un poco más arriba tiene que haber ya nieve, y me temo que no en demasiado buenas condiciones.


Como ya estamos un poco hasta ahí mismo de nieves, hielos y barros, propongo (a ver que os parece) ir a probar el escabeche de Bernardos, que creo que está muy rico ;). Tenéis el sabado enterito para opinar y, en su caso, proponer alternativas.


Os pongo una foto del peazo-bocata de filete que me he zampado en el Vado, como en los viejos tiempos antes de que se pusieran de moda geles y barritas (inventos del mismísimo Lucifer).


Viernes, 18'15 de la tarde en el bosque de Valsaín, silencio casi absoluto, solo se oía el río. El pan todavía crujiente con el juguito bien pringadito en la miga. Estaba frío, pero me supo como recién hecho.

¿Cabe mayor placer?.

Rotunda, indubitablementemente, sí; Pero no era el momento.

domingo, 13 de febrero de 2011

Peispan, Passpan o Pasapán


Lo que más me ha sorprendido de la etapa de hoy han sido los pantaloncillos cortos que llevaban el sherpa-Chomin y el sherpa-Rinoceronte. No creo que el día estuviera para esas alegrías, pero como el domingo pasado pasamos durante media hora un poco de calorcillo (más debido al esfuerzo que a la temperatura), hoy se han empeñado en enseñanos las canillas. Y a Chomin se le puede pasar, que la pelambre que lleva le protege hasta del tifus, pero el metrosexual del Roci, que se depila y , lo ha pasado un poco de malitamente con el ris que hacía hoy.

Al agruparnos en el Cuartel General (Puente de Jierro), vimos pasar a un grupillo, los Segovia MTB. Poco antes de iniciar la marcha apareció el sherpa-Pródigo (Enrique) y junto a sh-Sherpa, sh-Chomin, sh-Rocinante y yo, nos pusimos en marcha hacia Peispan, lugar mítico. Hoy faltaba el sherpa-Epicondilitis, también conocido como sherpa-Colitis (a.k.a.) sherpa-Ete en los ambientes.

Asfalto, que el camino hasta Peispan no tiene buena pinta debido a los barros. A duras penas conteníamos al sherpa-Lebrel, que estaba rabioso, con las venas de las pantorrillas hinchadas, en su persecución del grupo que nos antecedía. Pero hete akín que, como en una película mala, el tren vino a interrumpir tan desenfrenada galopada. Y menos mal, porque en los genes de los sherpas no está eso de picarse, al menos desde que cumplimos los cuarenta, siglos ha.


Raja que te raja, pasaron estos primeros kilómetros de rutina. Los dos puntitos de delante son el sh-Sh y el sh-Ro, que es el que más raja de todos, con diferencia abismal.


El el Panorámico ya abandonamos el asfalto, terreno que causa sarpullido a la tribu sherpa. Terreno húmedo, pero no está mal. La Mujer Muerta aparece despajada, pero en el huequecillo del Peispan se apelotonan unas nubes que no tienen demasiada buena pinta.


Pasamos la puerta que conduce al Rancho del Tabanero, y aquí la cosa empieza a ponerse más divertida. Primero, barro. Luego, nieve y luego hielo. Para pasar inmediatamente y sin solución de continuidad a barro+nieve+hielo en una "divertidísima" y aleatoria sucesión.


Justo al dejar a nuestra derecha a La Cachiporra, nos encontramos a los Segovia MTB arreglando una pequeña avería y con talante indeciso. Que dicen que hay hielo y que se dan la vuelta.

Vamos a ver: De las virtudes teologales que aprendimos cuando pequeños, la más importante para los sherpas, sin duda, es la fe. Hay que tener fe. Sin fe no vamos a ningún sitio, sherpas. Con fe y confianza, dado el primer paso, que es el difícil, los demás son ya más fáciles.


Y así nos pusimos todos en marcha, aunque en la subida alguna de las unidades se dio la vuelta, por lo que nos contaron arriba.


Passpan (Peispan) es lo que tiene: Un tramo amable seguido de otro que nos muestra una cara agria y desabrida (palabra que intentaba colar hace varias crónicas). A pequeños trechos con el suelo más o menos ciclable le seguían interminables rampas con un hielo asquerosito y con un viento cortante del c*r*jo (siendo *="a").


Y lo peor, lo que más cansa, no es el pedaleo, sino la concentración que hay que mantener constantemente para no salirse del estrecho carril en el que el hielo está más texturado por el dibujo del neumático de un todoterreno, o donde el barro está más compacto. Sin respirar durante kilómetros para no perder tracción, todos batimos el récord del mundo de apnea.


Curiosamente, el terreno estaba mejor arriba que en el inicio del puerto. Así de caprichoso es el Passpan.


Sh-Sh, conteniendo la respiración. Está colorao.
Arriba hacía frío. Ninguno esperábamos otra cosa. Pero es que el sh-Rinoceronte está temblando y acurrucado, hecho una pelota. No os digo más que parecía Güaldisnei. Y todo por coqueto y metrosexual. A ver si aprende y se abriga el próximo día.


La chica del otro grupo (me apunta Remi en los comentarios que se llama Marta) subió como una jabata, sin protestar ni decir ni mú. Además, sonriendo para la foto que, por cierto, me salió pelín movida.

More Martas wanted

El grupo en breve refrigerio (palabra que viene aquí al pelo). Aquí, tirón de orejas: Alguno dejó desperdicios sin recoger o, al menos, sin retirar. Que quedan feos en medio del camino ¿no?.


Llega Chomin...


...al que le fallan los frenos y sigue en alocada carrera cuesta arriba hacia los pieses de la Mujer Muerta.


Aquí el grupo se hace añicos: Unos siguen hacia Marichiva (y creo que Fuenfría y SG), otros se dan la vuelta... El grupo de los sherpas se rompe del todo: Roci y Sherpa se bajan arguyendo diferentes razones que, al final, vienen a explicarse con la onomatopéyica expresión de "co-co-co-coooo...". Enrique duda un poco para decidir por fin bajarse también, pero dando más vuelta por la cañada hasta Segovia. Por mi parte, yo me dejo seducir por el encanto del sh-Chomin: Trastearemos por la laderita de la Mujer Muerta, manteniendo la altura, para buscar una bajada del demonio, pero muy divertida.

Al fondo, el embalse del Vado de las Cabras

Izquierda, derecha, p'arriba, p'abajo... ya sabéis. Revisando el el track en el gepese, no vamos recto ni horizontal por más de 50 metros. Para no aburrirnos, nos entretenemos esquivando placas de hielo. Bueno, creo que Domingo no las esquivó todas, que le da igual. De vez en cuando vimos alguna marca de rueda que supongo que pertenecían a David Kamorka, que se hizo esta ruta ayer pero al revés. Por cierto, esperaba encontrármelos hoy por aquí, pero no vimos ni rastro. ¿Dónde sus metisteis, kamorkas?.


Por fin salimos al embalse del Vado de las Cabras que, una de dos: O está helado, o lo han llenado de leche (Chomin dixit).


Pequeño cambio de dirección, ¡y fíjate tú!. La buena noticia es que era nieve "de la buena", de la ciclable.


No era el mismo tipo de nieve la que había en el desvío a Marichiva. Ésta era de la variedad puñetera. La mayor parte de la subida la tuvimos que hacer "a pata".


Curiosamente, las rampas del final estaban mejor.


Y llegamos arriba pedaleando. La niebla se había echado, pero no hacía viento. El día nos había respetado, a pesar del frío, y a pesar de las predicciones que había de precipitaciones de nieve.


En Marichiva me atacó el mal de altura, yo creo, porque no puse objeciones al maquiavélico plan de Chomin que consistía en bajar por la trialera de enfrente para coger el tren en Cercedilla, que salía en media hora. Me acordé de otras bajadas a coger el tren con la hora "pegada al culo" y las risas subsiguientes. Desterré esos pensamientos de mi cabeza y bajamos por la trialera esa, llena de piedras y raíces.

Llena de piedras y raíces en otras ocasiones; porque hoy esas eran las partes buenas. Los primeros kilómetros estanban salpicados de "preciosas" placas de hielo, a veces bueno, a veces malo. Yo, cerraba los ojos y seguía a Chomin como podía. En un par de días habrá vídeo.

Ésta es la bajada que digo. Envidia ¿ehhh?
Cuando al final abrí los ojos, estaba en la estación de Cercedilla sano y salvo, contra todo pronóstico. Una cañita rápida y p'al trenecito chucuchú.

¿Y LA CRÓNICA?

A estas horas de la tarde tendrías que tener la crónica terminada, que luego se te adelanta la competencia y se llevan los derechos de autor, amen de la audiencia. Asín que espabila Fabila, que viene el oso.

Trialera: Dícese de la parte del camino donde tus huevos abandonan su lugar para hacerle compañia a la garganta.